1. Presentación

La intención del informe es presentar la cuestión sobre cómo y qué tipo de oferta cultural es la que se está constituyendo en la Ciudad de Buenos Aires. La información generada de estos análisis espera ser material de insumo para profundizar en el diagnóstico y planificación de las políticas culturales de la ciudad, enfocando en:

  • La participación ciudadana y el pleno ejercicio de los derechos culturales.

  • La deconstrucción de los apegos identitarios y la valoración de la creación sociocultural autónoma tanto privada como comunitaria.

  • La promoción a la mayor circulación de los bienes cultuales en las ciudades para combatir el deterioro de las relaciones sociales, y la puesta de límites al fundamentalismo del mercado.

  • La inclusión del territorio como aspecto del problema, y el trabajo en red y cooperación con distintos agentes.

Observaciones:

2. Zonificación de la oferta cultural pública y privada

Mapa que identifica las zonas calientes y frías de concentración espacios culturales en la ciudad. Cuando hacemos la segmentación según barrios aparecen dos zonas claramente demarcadas.

Me valí de la categorización que hace el GCABA sobre espacios culturales:

La primera, expresada en color azul, constituye la zona fría de concentración de espacios. Desde Barracas, hasta Villa Riachuelo y subiendo por Villa Devoto hasta Saavedra son escasos los espacios que hay en cada barrio. Estamos asumiendo que hay a lo sumo de 1 a 2 espacios cada 1000 personas.

Mientras que en el centro y norte, en rojo, hay una alta concentración de espacios culturales, y que van desde la Boca con el turismo cultural y las galerías del Distrito de las Artes, siguiendo por San Telmo, el microcentro con sus teatros y librerías, seguimos por Recoleta donde hay varios museos y galerías, y finalizamos por Palermo, Chacarita y Villa Crespo con la alta concentración de espacios culturales, de exhibición, y bares.

También:

  1. Aquellos vecinos y vecinas que no están emplazados en las zonas concentradas tienen menos posibilidades para la participación, consumo de bienes y hasta en la formación de varias propuestas culturales, contrario a quienes sí están emplazados allí y tienen muchísimas más oportunidades, asumiendo una oferta más variada.

  2. Les vecines más alejados de las zonas concentradas están obligados a movilizarse un largo recorrido hasta llegar a estos lugares. Esto ya implica un gasto agregado por el valor del viaje, ya sea en la ida como la vuelta, que si es de noche el transporte es menos frecuente.

  3. El Programa Cultural en Barrios no sería una política lo suficientemente extensa en el territorio para contrarrestar esta desigualdad. A ello le sumamos la definición de su beneficiario en calidad de “asistente”, hacia quién y “cada una de las veces que se exhibe en sus diferentes modalidades, algunas de las expresiones del arte”.

Cuando cruzamos las propuestas culturales según Hogares con Necesidades Básicas Insatisfechas

3. Mapa de espacios culturales según hogares con NBI

Mapa que detalla la cantidad de Hogares con NBI por cada espacio cultural, segmentado según barrios.

Es ilustrativo el hecho de que la brecha de hogares con NBI por cada espacio cultural se reduce los barrios del norte y centro, donde era alta la oferta cultural. Mientras que en aquellos barrio del sur, donde ya de por sí era baja la oferta, se amplía muchísimo más la brecha, de hasta 570 hogares por cada espacio. La brecha de acceso es más ejemplificativa cuando notamos que, pese a que en el sur de la ciudad hay también pocos espacios culturales al igual que en Villa Devoto, Villa del Parque, Agronomía, otros, la brecha sigue siendo alta dado a las condiciones de los hogares.

También:

  1. La brecha se expresa también en barrios como Constitución y San Cristóbal, barrios cercanos al microcentro de la ciudad. Es decir que la centralidad geográfica tampoco sería un factor decisivo sobre el emplazamiento de la cultura.

  2. La dinámica cultural pareciera estar emplazándose en zonas de altos ingresos económicos. Es decir, una cultura cuya propuesta de consumo y/o participación expresaría que es cara y que no cualquiera puede acceder a ella.

  3. Esta tendencia llevaría a pensar la perspectiva de las políticas culturales que asume el GCABA en zonas periféricas y más populares. Un programa como el PCB, que “lleva la cultura”, ¿es suficiente como medio que potencie y mejore culturalmente las condiciones de vida de las y los vecinos allí emplazados?

4. Mapa temporal de valor de m2 en dólares: 2017-2020

Tracé un mapa temporal que visibiliza la tendencia de valorización del M2 en dólares desde 2017 hasta 2020. Como primera observación, la constante de valores altos que asumen los terrenos de los barrios del norte, pero que en segundo lugar siguen aquellos barrios de Villa Crespo, Chacarita, Villa del Parque, y otros barrios donde está comenzando a emplazarse la oferta cultural de la zona.

También:

  1. La cotización de los terrenos de aquellos barrios con mayores hogares con NBI sigue la distribución de la oferta cultural. Es decir, emplazados al margen de ella.

  2. De manera opuesta, desde el 2018 los barrios más caros devienen en la distribución actual de la oferta cultural existente.

  3. Como marco del tipo de oferta cultural que se estaría consolidando en la Ciudad de Buenos Aires, admitimos que tiene un reverso de gentrificación. Es decir que profundizaría un proceso de exclusión y repulsión de sus habitantes.

5. Mapa temporal de actividades culturales del GCABA: 2018-2021

También tracé un mapa temporal que visibiliza la distribución de las actividades realizadas por el GCABA desde 2018 hasta 2021.

Si bien es notable que en el 2018 y el 2019 las actividades realizadas se mantuvieron por fuera de las zonas de alta oferta cultural recién observada, también es notable que la tendencia del norte también creció y de hecho se mantuvo incluso durante momentos pandémicos.

Tambien

  • San Nicolás y La Boca son dos barrios claves para el desarrollo de las actividades por el GCABA. Podemos admitir esta tendencia a partir de que en el primer barrio está el obelisco, como punto neurálgico de la ciudad donde se desarrollan eventos masivos. Por el lado de La Boca está La Usina del Arte, donde según otros informes realizados, se desarrollan hasta el 75% de las actividades de la Comuna 4.

  • Durante la pandemia se priorizaron las actividades en los barrios con más bienestar económico. Esto suma al argumento sobre qué perspectiva de la cultura asumió el GCABA cuando se desarrolló la pandemia. También abona al argumento de que la pandemia no es igual para clases ricas como para clases populares, ahora también en un aspecto de participación y consumo de bienes culturales.

  • Si bien la cuestión del contagio es un factor clave al pensar actividades presenciales, y los espacios reducidos como centros culturales son dificultosos para llevar a cabo actividades, los festivales al aire libre podrían haber tenido lugar en barrios más al sur. En este caso se hace explícito el corto alcance que puede tener el PCB al pensar la gestión de la cultura durante la pandemia, al asumirse como principal camino para llevar la cultura a los barrios.

6. Mapa FESTIVAL FIBA 2022

En verano de ese año se ha realizado el Festival FIBA 2022, que reúne artistas internacionales de las industrias del teatro, la música y la danza. En este mapa plasmo su zona de influencia según los espacios culturales donde tuvo lugar.

Por otro lado, también se ha recopilado la información de todos los festivales que lleva a cabo el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Entre ellos están el: Festival Mundial del Tango, Bafici, Festival de Jazz, de Danza Contemporánea, Campeonato de Baile de tango, Ciudad Emergente, Buenos Aires Danza Contemporánea y Semana del Orgullo.

También:

  • La zona de emplazamiento, en un momento de aperturas “pos-pandémico”, del festival continúa la tendencia de agrupamiento según barrios más valorizados y con hogares con mejor pasar económico.

  • Su epicentro fue entre la Avenida Córdoba y el Obelisco, desplazándose hacia los barrios de Chacarita y Villa Crespo, mayormente que Palermo. También tuvo lugar en espacios como Villa Urquiza y Saavedra. Esto es una llamada de atención hacia donde ha puesto el foco el GCABA al desarrollar un festival en la ciudad.

  • También es notorio que no ha tenido en ningún lugar de los barrios donde casi no hay oferta cultural. La gestión de estos festivales sigue profundizando la brecha de acceso, consumo y participación en el tipo de cultura que promociona el GCABA.

  • Estos festivales, de tipo internacional, también sigue la tendencia de los mega eventos que tienen lugar en el norte como centro: Movistar Arena, el Hipódromo, Groove, Saldías Polo Cultural, Parque de los Niños.

  • También es notable que haya tenido lugar en la zona de la costanera de Puerto Madero, zona hoy en disputa.

  • El tipo de festivales realizados estarían centralizados en zonas donde se realizan Mega eventos como el Luna Park, la Usina del Arte y otros lugares centralizados de la ciudad.

7. Mapa de oferta gastronómica en CABA

El mapa delimita la zona de mayor concentración de locales gastronómicos tipo cafés, pubs y bares. Notamos que hay dos epicentros de la oferta; uno en Palermo y otro lindante en Recoleta, más cercana a la zona del Obelisco. Podríamos hallar un tercero por Belgrano. En este caso no incluimos a los restaurantes porque creemos que esta selección expresa mejor la gastronomía “creativa” de autor que está de moda en el último tiempo; desde cafés, tragos, comidas y más.

El mapa delimita la zona de mayor concentración de locales gastronómicos tipo cafés, pubs y bares. Notamos que hay dos epicentros de la oferta; uno en Palermo y otro lindante en Recoleta, más cercana a la zona del Obelisco. Podríamos hallar un tercero por Belgrano. En este caso no incluimos a los restaurantes porque creemos que esta selección expresa mejor la gastronomía “creativa” de autor que está de moda en el último tiempo; desde cafés, tragos, comidas y más.

También:

  • Si bien el epicentro más grande está concentrado en Palermo, su área de influencia se extiende por los barrios de Chacarita, Villa Crespo, pero no sigue bajando, sino que se mueve al este, hacia Villa del Parque, Agronomía, Paternal y Colegiales. Cuando cruzamos los datos con oferta cultural del GCABA como la de los espacios privados e independientes, toma mayor importancia esta distribución, ya que la cultura pareciera seguir la misma tendencia que los espacios gastronómicos. De nuevo, consumos y prácticas culturales emplazadas en barrios de consumos caros.

8. Los principales puntos del informe

El territorio es un factor que estaría condicionando las instancias de producción, consumo y participación cultural por parte de las vecinas y vecinos de la ciudad. Esto, en parte, por la zonificación de una alta oferta cultural que se está consolidando en el norte y centro de la ciudad. Ello implica:

  1. Una distancia geográfica considerable desde los barrios más alejados hacia la oferta cultural allí emplazada. Este condicionamiento significa un obstáculo más a un horizonte de democratización de los bienes y productos culturales. Hasta el momento no hay políticas culturales que contemplen los condicionamientos de las distancias hacia las zonas de alta oferta cultural y/o megaeventos.

  2. El PCB no puede ser la única política que promueva la participación, producción y consumo de bienes culturales en las zonas más alejadas de la ciudad, tanto por el único enfoque de su propuesta, en enseñanza artística como por su cantidad. Sumado a ello y en vistas de que incluso durante la pandemia el GCABA priorizó las actividades en zonas de altos ingresos, genera más dudas tanto sobre la eficacia del Programa Cultural en Barrios.

  3. Este emplazamiento está acompañado por condiciones socioeconómicas, como la de mayor cantidad de hogares sin NBI, junto a la valorización más alta del m2 en dólares de la ciudad. A esto se suma la concentración de los locales gastronómicos, de ropa y otros productos, cuyo rótulo de “autor y creativos” suelen ser caros. Es decir, que la marca cultural que pareciera estar asumiendo la cultura estaría ligada a las industrias culturales y creativas, y disponible para un público que tiene acceso a estos. Es decir, que participar en un espectáculo musical, una obra de teatro, o talleres implica también consumir una bebida o una comida allí, volviéndose más caro su participación, ya que no existen mecanismos de regulación de precios en estas zonas. Estos hechos dificultan instancias democráticas que integren a las vecinas y vecinos en la vida cultural de la ciudad.

  4. Sobre los festivales realizados: i) Están enfocados en una política cultural de acercamiento y consumo de bienes culturales que no involucran una novedad y/o problematización sobre la construcción de las identidades culturales que hoy conviven en la ciudad. La excepción es el festival del colectivo LGTBIQ+, ii) Los festivales omiten las formas de producción de cultura que llevan adelante las distintas comunidades y organizaciones a lo largo de toda la ciudad, estando lejos de un paradigma de democracia cultural participativa.