Diagnóstico Microcréditos Banca Pública

Si bien el espíritu de la idea del microcrédito, modernizada y reconcebida por el Dr. Muhammad Yunus, buscaba el desarrollo de la población a partir de su independencia económica, se observa que hay más cosas que entraman el sistema de microcréditos, a partir de lo que hace el individuo con la oportunidad brindada para su desarrollo.

Los planes de microcréditos buscan que la población tenga la opción de alcanzar el bienestar económico a través de emprendimientos individuales o en pequeños grupos de cooperativas, pero el diagnóstico demuestra que, al momento de obtener el microcrédito, los beneficiarios no invierten de manera adecuada su capital y por ende, no logran cumplir con el pago de sus compromisos crediticios. Las razones pueden ser muchas, pero el impacto de verse sumido en deudas hace que los microcréditos se convierten en una responsabilidad muy difícil de asumir por personas que no tienen una cultura crediticia y que en vez de invertir el capital para proyectos o negocios, los utilizan en otras actividades generalmente asociadas al pago de otras deudas previas o cumplir con la satisfacción de otras necesidades.

Es por eso que el Estado se encuentra en la necesidad de intervenir en los procesos de microcréditos a través de la banca pública, para poder ofrecer la opción crediticia a esos estratos más necesitados, ya que cuenta con los medios y los recursos necesarios para poder manejar el sistema y hacer que el mismo funcione, traduciéndose en desarrollo económico, nuevas fuentes de empleo, entre otros grandes beneficios. Incluso, se crea el Decreto con fuerza de ley de creación, estímulo, promoción y desarrollo del sistema microfinanciero, en el año 2001, para que, por via legislativa, se impulse el proceso de microfinanzas para impulsar la economía desde el principio de la cadena económica.

El problema es que no son suficientes. Los microcréditos entregados usualmente se los come la inflación, y la falta de compromiso de los beneficiarios (unido a la falta de contraloria social) hace que la banca pública y privada utilice la política microfinanciera como un mero requisito para cumplir la ley, más, en apariencia, no resulta rentable para la productividad de la banca, así como llenar de deudas al beneficiario.

A continuación el número de Microcréditos y Bolívares otorgados anualmente desde el 2003 hasta el 2010:

ANIOS CREDITOS BOLIVARES IPC97 IPC2007 deflact2007
2003 2877 1464950 352.1 46.77 3132243
2004 7232 10371430 428.7 56.94 18214665
2005 2184 3024700 497.1 66.03 4580797
2006 3913 9060616 565.0 75.04 12074382
2007 5471 21965869 670.7 89.08 24658587
2008 3991 75737856 0.0 117.09 64683454
2009 3784 47049267 0.0 150.57 31247438
2010 1860 4631747 0.0 194.33 2383444

Se puede observar en este periodo de tiempo (2003 - 2010), específicamente en la cantidad de créditos por año, como en 2003 se empieza con 2877 créditos, pero, para el 2004 hay un repunte importante de casi el triple, sobrepasando los 7000 créditos anuales. Luego, para el año siguiente, baja hasta ubicarse a los niveles de 2003 con un ligero incremento en el 2006 (lo que podría deducir que el año 2004 fue un caso atípico). Para el 2007 hay un incremento de casi el doble de créditos anuales, llegando a 5471; pero luego de ese año se observa una decaída constante: 3991 créditos en 2008, al año siguiente 3784 y por último, la caída más dramática, 1860 en el año 2010.

Viendo estos datos, se puede decir que el apoyo del Banco del Pueblo Soberano a la política micro financiera no ha sido lo constante que se había previsto. Salvo en dos años, 2004 y 2007, que coincidieron con las elecciones regionales y el referéndum consultivo a la enmienda constitucional, respectivamente. Es decir, que puede presumirse un nexo entre el aumento de los microcréditos otorgados con el tiempo electoral de Venezuela.

Ahora, no solo hay una afectación entre la cantidad de microcréditos dados por el Banco del Pueblo Soberano, sino que también en los montos otorgados hay un análisis pertinente. Para basar el análisis, utilizaremos el proceso de deflactación con los IPC de los años 1997 y 2007, debido a que el IPC nos permitirá ver el monto real de los créditos otorgados, eliminando la inflación. Incluso, puede compararse el impacto de la inflación en 10 años de diferencia. En todos los casos de estudio, los IPC de 1997 y 2007 han aumentado a lo largo de los años de manera constante.

Vemos ahora la misma tabla con la Deflactación correspondiente al IPC97 e IPC2007 para los mismos años

ANIOS CREDITOS BOLIVARES IPC97 IPC2007 deflact2007 deflact97
2003 2877 1464950 352.1 46.77 3132243 416060.778188015
2004 7232 10371430 428.7 56.94 18214665 2419274.55096804
2005 2184 3024700 497.1 66.03 4580797 608469.120901227
2006 3913 9060616 565.0 75.04 12074382 1603648.84955752
2007 5471 21965869 670.7 89.08 24658587 3275066.19949307
2008 3991 75737856 0.0 117.09 64683454 NA
2009 3784 47049267 0.0 150.57 31247438 NA
2010 1860 4631747 0.0 194.33 2383444 NA

Se observa que en el año 2003, se otorgaron 1.464.950 bolívares en créditos. Al hacer el proceso de deflactación, descubrimos que para 1997 se transforma a 4.160,61 bolívares y, para 2007, a 31.322,43 bolívares. El promedio de bolívares otorgado es de 509, 19 por cada crédito, pero, con la deflactación de 2007, el promedio de bolívares/crédito desciende drásticamente a 10,89.

Para el año 2004, se otorgaron 10.371.430 bolívares en la suma de créditos en el año. Con el proceso deflactario, en el año 1997 pasa a ser 24.192,75 bolívares, y 182.146,65 bolívares deflactados para el año 2007. Haciendo un promedio para el año 2004, en valores relativos se ubican a 1.434,10 bolívares por crédito. Pero, con la deflactación de 2007 se ubica a 25,18 bolívares/crédito.

El caso de 2005 registra una suma créditos que resultan en 3.024.700 bolívares. Al realizar la deflactación, para el año 1997 se transforma en 6.084,69 bolívares, y para el 2007 en 45.807,97 bolívares. Al realizar el promedio de bolívares por créditos para 2005 es de 1384,93. Pero con el monto real, deflactado al 2007, resulta el promedio en 20,97 bolívares por cada crédito.

Al analizar el año 2006, hubo un incremento de bolívares otorgados por créditos al año, sumando 9.060.616 bolívares. Pero, al deflactar para observar el monto real, se observa que, para el año 1997 se transforma en 16.036,49 bolívares. Mientras, para el año 2007, se coloca en 120.743, 82 bolívares en montos reales. El promedio para 2006, se ubica en 2315,51 bolívares/crédito; más, para el promedio deflactario de 2007 pasa a ser de 30,85 de bolívares por cada crédito otorgado.

El año 2007, el otro repunte observado en cantidad de créditos, suma un total de 21.965.869 bolívares en créditos totales. Pero para la deflactación de 1997 se convierte en 32.750,66 bolívares así como para 2007 en 246.585,87 bolívares. Al realizar el promedio, se ve que en 2007 el promedio bolívares/crédito es de 5.503,85. Y al observar el promedio con la deflactación de 2007 es el de 45,07 bolívares por crédito.

2008 representa una suma de créditos anuales que se transforman en 75.737.856 bolívares en total. A partir de este año no es posible conseguir los datos deflactados para 1997, pero si la deflactación de 2007, que se observa en 646.834,54 bolívares. El promedio en montos del 2008 es de 18.977,16 bolívares por crédito; mientras que con el monto real (deflactado en 2007) de bolívares por crédito se transforma en 162,07.

La suma de créditos para el 2009 se ubica en 47.049.267 bolívares, por primera vez se baja la cantidad de créditos al igual que el monto dado. Igual, el IPC se incrementa, lo que también modifica al momento de deflactarlo en el año 2007, específicamente pasa a 312.474,38 bolívares. El promedio de valor de bolívares por crédito para el 2009 es de 12.433,73 (comprobando el declive con respecto a 2008), comparado al promedio deflactado de 2007, transformado en 82,57 bolívares/crédito.

Finalmente, en el año 2010, la suma de los créditos llega a 4.631.747 bolívares, pero, al deflactar para el año 2007 se transforma en 23.834,44 bolívares. En ambos casos, el decrecimiento en los montos es dramático. Al observar el promedio en monto de bolívares por crédito es de 2.490,18, y, al ver el promedio con los montos deflactados llega a 12,81 bolívares/crédito.

Comparativo cantidad de bolívares en microcréditos otorgados vs bolívares deflactados al IPC97 e IPC2007 en el período 2003 - 2010:

## Warning in xy.coords(x, y): NAs introducidos por coerción

Como conclusión en lo observado, podemos decir que la ley de microcréditos, si bien responden a una necesidad concreta por parte de las pequeñas y medianas empresas, no cubren por completo las necesidades de los microempresarios. Otorgar los créditos se ha transformado en una estrategia política, ejemplos claros los mencionados anteriormente: 2004 y 2007. Pero además, en todo el estudio se observa con preocupación, cómo los montos de los créditos ascienden pero no se toma en cuenta la situación de inflación ascendente y sin pausa de la economía nacional. Esto provoca una falta de información real para la opinión pública, quien lee la noticia como un impulso para el empresario, obviando el sentido concreto del quehacer con el crédito que le han suministrado.

Peor es el caso en el a partir del 2008 y acentuado en el año 2010. En 2008 se ve una disminución del dinero aportado para los créditos comparado al año anterior, sin incluir la inflación, que creció de manera importante entre esos dos años. Eso puede leerse como un retiro al apoyo a la microfinanza. La falta de rentabilidad real, la morosidad de los beneficiarios, el fenómeno rentista petrolero típico del país y la pertinencia política, son motivos por los cuales el gobierno nacional puede haber quitado peso a la entrega de microcréditos. Y es en 2010 donde el proceso se vuelve más dramático: una reducción abismal del monto de créditos, cantidad de créditos y del aprovechamiento de estos para la solución del beneficiario, ya que, si se observa la tabla de promedios, no alcanzaría para cubrir un negocio de ninguna manera posible.

Es por eso que, a partir de este informe, se invita a revisar la pertinencia de esta política pública. Y el principal motivo de esta revisión es que se está ocupando una partida presupuestaria en una política que no genera ganancias al Estado. Tampoco genera una diversificación real de la economía, lo que se traduce en la ausencia de producción nacional. Es necesario reformular y hace real la misión y objetivo de la ley, para que tenga un sentido productivo al aparato económico nacional.