Un “cupido” poco conocido

Ibycus rachelae juvenil.

Ibycus rachelae adulto.

Su nombre científico es Ibycus rachelae y es una especie de molusco de la clase de los gastropodas de color verde y amarillo muy particular. Fue descubierta en el 2008 en los bosques montañosos de Malasia, concretamente en la jungla Gunung Kinabalu a casi 2 000 metros sobre el nivel del mar, es la tercera más grande del mundo, es uno de los sitios con mayor biodiversidad del planeta. Esta zona se conoce como Borneo, y de ahí una de las partes de su nombre.

En realidad, se trata de una babosa ‘a medias’ debido a que cuenta con un caparazón como el de los caracoles (que pertenecen a la misma familia), en el que se esconde cuando está en peligro, se siente amenazada o es momento de descansar. La cola de la babosa mide tres veces la longitud de su cabeza, lo que le permite acurrucarse para dormir.

Lo más inusual, es cuando se aparea, la babosa que ‘actúa’ de hembra (cabe recordar que las babosas son hermafroditas y pueden elegir de qué sexo ser según la ocasión) dispara un llamado “dardo de amor” hecho de carbonato de calcio que inyecta una hormona en su posible pareja para aumentar su fertilidad y pueda aumentar la cantidad de huevos.

Se puede encontrar más información en http://natuurtijdschriften.nl/download?type=document&docid=643872