Allison Bonilla
A principios de marzo del año 2020 en Costa Rica, se dio a conocer la noticia de la desaparición de una joven de 18 años llamada Allison Bonilla; ella desapareció en la zona de Ujarrás cuando volvía a casa de estudiar, se iba comunicando con su mamá y su novio a quienes les menciono que estaba preocupada de que la iban siguiendo; luego de esto desapareció sin dejar ningún rastro.
Por aproximadamente seis meses el Organismo de Investigación Judicial ha estado investigando este caso y hasta el 3 de setiembre del presente año; se detuvo a uno de los principales sospechosos de secuestrar y dar muerte a Allison.
Hoy 4 de setiembre, justamente seis meses después se su desaparición, el sujeto declaró que violo, asesino a golpes y se deshizo del cuerpo de Allison en un botadero clandestino, y el principal motivo del sospechoso para hacerle esto a Allison se debe a que ella no quería salir con él como amigos ni como pareja; el sujeto no soporto que una mujer lo rechazara y la asesino. Por increíble que suene a Allison la mataron por decir no, ¿tan difícil es respetar la opinión de una persona?
El caso de Allison Bonilla en lo personal me ha impactado en gran manera, era una chica de una edad similar a la mía; quien perfectamente podría haber sido mi amiga. Saber que la secuestraron volviendo a casa de estudiar solo me hace pensar en muchas de las veces que me he sentido en riesgo cuando vuelvo a casa de la universidad; caminando atenta a cualquier carro, moto o persona que vaya pasando e ir pensando en si podre correr lo suficientemente rápido para llegar a salvo si alguien me intenta hacer daño. Pero sobre todo me duele pensar en el dolor que puede estar sintiendo su madre y sus seres queridos; porque dada la situación actual que vivimos las mujeres en Costa Rica no puedo evitar ver mi reflejo y el de mis amigas, compañeras y familiares en el rostro de Allison.
Claramente Allison es solo un caso de los muchos feminicidios que se dan en nuestro país, pero es que es horrible pensar y sentir que ninguna está a salvo, que sin importar nuestra edad, nuestra formación, nuestras creencias o estilo de vida; nada nos protege de que otra persona se sienta con el poder o la autoridad suficiente para hacernos daño solo porque somos mujeres y es que en cualquier momento yo, mis amigas, mis compañeras, mis familiares o cualquier otra mujer podría ser la siguiente.
Con esta pequeña reflexión solo tengo el propósito de desahogarme un poco y de agarrar fuerzas para seguir luchando, por las mujeres que ya no están, por las que estamos y las que vendrán; con la esperanza de que algún día todas podamos caminar a casa libres y no siendo valientes. Esto es para que el caso de Allison Bonilla no sea olvidado y se haga justicia; también por las demás mujeres que hoy nos hacen falta y nos duelen, porque no estamos todas.
No estamos todas Vídeo por Natasha Carmona, grabado el pasado 8 de Marzo del 2020, Allison tenía una semana de desaparecida en ese momento.