Fuente de datos: DGT.

La movilidad eléctrica no es el futuro, es una realidad que crece día a día tanto en consumo como en tecnología. Superpotencias como China o Estados Unidos han apostado por esta nueva tecnología de impulsar los vehículos desde hace años y se han posicionado como líderes mundiales del sector. Las ventajas que ofrece son indiscutibles, generando nuevos tipos de negocio y además es una forma de movilidad limpia; punto importante pensando en los problemas de polución que experimenta el planeta desde hace décadas.

En Europa las cosas se están haciendo relativamente bien pero como en todo se puede mejorar. Hay grandes desigualdades entre países y desde luego están lejos de alcanzar a China o USA respecto al número de eléctricos en las carreteras. Es por eso por lo que quizás se está apostando por la carrera en otro tipo de tecnologías del sector. Cargadores super rápidos, segunda vida de baterías o alternativas en vehículos de transporte público son algunos ejemplos.

Para comenzar esta breve infografía el primer mapa nos muestra el número de cargadores de coches eléctricos por países, un mapa con el número total y otro que nos permite comparar a los distintos países con un simple vistazo. Además, se incluye una pequeña tabla con la población en cada país; para hacernos una mejor idea de lo que representa el número de cargadoras para cada uno de los países.



Estaciones de recarga en Europa en 2018:



Población de Europa por país en 2019.
Total Alemania Austria Bélgica Bulgaria Chipre Croacia Dinamarca Eslovaquia Eslovenia España Estonia Finlandia Francia Grecia
512379225 82792351 8822267 11398589 7050034 864236 4105493 5781190 5443120 2066880 46658447 1319133 5513130 66926166 10741165
Hungría Irlanda Italia Letonia Lituania Luxemburgo Malta Países.Bajos Polonia Portugal Reino.Unido República.Checa Rumanía Suecia
9778371 4830392 60483973 1934379 2808901 602005 475701 17181084 37976687 10291027 66273576 10610055 19530631 10120242

Sin duda países como Países Bajos (líder en Europa), Alemania o Francia llevan la delantera en Europa. En Países Bajos, si tenemos en cuenta su población tenemos una electrolinera para 428 personas. En España en el año 2019 había un total de 11.609 gasolineras convencionales. Esto da alrededor de una gasolinera cada 4.000 personas. Una dura conclusión: Países Bajos tiene una ratio por persona 10 veces mayor para electrolineras que España para gasolineras convencionales.

De todas formas las previsiones en España respecto a puntos de recarga son muy favorables. El Gobierno ultima un real decreto ley que impulse la implantación de electrolineras y cargadores de vehículos eléctricos a lo largo y ancho del país. Así lo anunció en febrero el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, en referencia a un texto que verá la luz en las próximas semanas y que no hará sino fijar una legislación similar a la que regula las gasolineras para incentivar la entrada de operadores privados.

Las energéticas han apurado el paso para cerrar alianzas con centros comerciales, párkings, aeropuertos o empresas, que han sido objeto del despliegue de electrolineras más allá de las estaciones de servicio, el centro de las urbes o los domicilios particulares.

Como no podría ser de otra forma, los grandes grupos energéticos han realizado su particular juego de ajedrez para posicionarse en este negocio con el despliegue de puntos de recarga a través de la geografía española. Una carrera que, hasta la fecha, lideran Iberdrola y Endesa con planes que contemplan la instalación de 25.000 puntos de recarga hasta 2021 y de 36.000 puntos de recarga hasta 2022, respectivamente.

Esto es muy bonito, aunque la previsión que nos aporta Tableau es un poco más conservadora.

Evolución número de estaciones de recarga en España. Distinguiendo por tipo.





El parque de vehículos eléctricos en Europa está en concordancia, como es lógico, con los puntos de recarga. Destancan Noruega, Francia, UK, Alemania y Países Bajos.





En este punto podemos hacer notar que España está por delante de países como Dinamarca, Italia o Finlandia. Aunque siempre es interesante comprobar el ratio vehículo por persona.



En España en general las personas se están concienciando en la compra de híbridos y eléctricos. Planes RENOVE, subvenciones, ayudas, están haciendo que despeguen las adquisiciones de este tipo de coche. En los siguientes gráficos se puede observar como ha crecido el parque eléctrico en España en los últimos tres años y la suma por meses de estos tres años; donde destacan junio, noviembre y diciembre.



Aunque la evolución del coche eléctrico en España está avanzando poco a poco, las previsiones son positivas debida al cambio de normativas que mencionábamos antes y una bajada de precios.

Un estudio de Jato Dynamics prevé que en 2020 las ventas a nivel europeo superen las 600.000, mientras que el Informe Bloomberg New Energy Finance va más allá y considera que las ventas mundiales en 2040 serán de unos 41 millones. A nivel nacional y considerando el Informe “Previsiones en el Mercado de Automóviles Eléctricos” del Observatorio Sectorial DBK de Informa, el parque en 2020 se situaría en las 115.000 unidades.

Previsión que se acerca satisfactoriamente a la propuesta en este paper.



Algunos de los motivos que impulsan esta visión optimista son:

• Baterías más baratas: el precio del kWh se ha visto reducido durante los últimos años, disminuyéndose el coste en un 65% en comparación a 2010 (cuando su precio podía rondar los 1000 dólares por kWh), en 2017 estaba en torno a los 200, llegando a los 120$ para 2030.

• Mantenimiento más barato: a pesar de que los gastos iniciales pueden parecer superiores, el mantenimiento supone una rentabilidad a largo plazo, no solo por el consumo, sino también en cuanto a reparaciones, teniendo en cuenta que el número de piezas de un motor eléctrico es mucho menor.

• Mayor autonomía: este era uno de los principales impedimentos para su compra, pero se ha trabajado en su mejora, de modo que los kilómetros que pueda recorrer sean mucho mayores (se prevé que podría estar cerca de los 500 km para 2020) y que existan puntos de recarga rápida, permitiendo cargarlo en unos 10 minutos.

• Impulsos de los gobiernos y restricciones por contaminación: la búsqueda de la protección medioambiental no hace más que favorecer al desarrollo de este mercado. Cada vez se imponen más restricciones a los vehículos contaminantes en las principales ciudades, algo que también ocurre en España.

Por su parte, los vehículos eléctricos empiezan a ser protagonistas de determinadas ventajas, tanto en la circulación como en las ayudas para su compra, si bien esta última faceta no está del todo desarrollada a nivel nacional. Sin embargo, ya se aprecian unos indicios favorables, al igual que ocurre con el contexto internacional, al que España debería sumarse, con beneficios tan relevantes como los que se ofrecen en Noruega (exención de peajes, incentivos a la compra, beneficios fiscales, etc.). Si esto ocurriera, todo apunta a que su desarrollo será todavía mayor, considerando que la percepción hacia estos nuevos modelos es cada vez más positiva.





Si sumamos los datos de las dos últimas tablas, la del parque eléctrico total, unos 80K vehículos y la previsión de ventas para el 2020 obtenemos unos 105000 vehículos, bastante parecida a la previsión antes citada. Teniendo en cuenta lo mucho que suelen bailar estas cifras.

Aunque es muy probable que después del incidente con el Covid-19 las ventas se vean reducidad considerablemente.

Tambien en la anterior gráfica que nos da una previsón hasta el 2040 es interesante nombrar que el parque móvil total español comenzará a decrecer en el 3035; donde la curva alzanca su máximo. Esto se puede deber a varios factores, pero pricipalmente a dos:

• Que continúe el éxodo hacia las mayores urbes, donde se usa mayoriatriamente el transporte público.

• La total aceptación del sharing.

Personalmente creo que esta gráfica podría incluso exagerarse más; no llegando a ese máximo de parque móvil y/o que la curva comience a decrecer antes.



Por último vamos a hablar de lo que acabamos de nombrar; el sharing.

En este caso como sharing nos referimos al nuevo modelo de alquiler de vehículos, que ha sido tendencia en todo el mundo y que ya se ha establecido, que consiste en ofrecer una flota a los usuarios de tu plataforma para que estos los usen durante breves periodos de tiempo.

Por lo general, al hablar de vehículos eléctricos se tiende a pensar en los coches y, en ocasiones, en motocicletas y ciclomotores, pero las posibilidades van más allá:

• Autobuses eléctricos: el transporte público también hace sus esfuerzos por reducir la contaminación. Aunque todavía pocas ciudades cuentan con autobuses completamente eléctricos, se empiezan a ver propuestas e indicios, también a nivel nacional en ciudades como Madrid, Barcelona, Zaragoza o Bilbao. La capital ha puesto en marcha una línea de EMT completamente eléctrica, que se basará en una carga que puede completarse en unos ocho minutos.

• Bicicletas eléctricas: cuentan con una batería y control de asistencia que facilita el recorrido de trayectos más largos, con una autonomía de entre 50 y 80 km. El sensor de pedaleo recibe la fuerza del movimiento y ofrece ante él determinada resistencia. La rueda trasera puede girar con un pequeño motor eléctrico que hace su uso más llevadero. Su relevancia es destacable (existiendo, incluso, un evento dedicado en exclusiva a ella (http://ebikedays.es/)), pero su presencia en las ciudades no es tan notable como la de otros medios de transporte. Pero uno de los grandes problemas que pueden ocasionar es que no se controla su número o su mantenimiento se puedan convertir en basura urbana como ha ocurrido en China.

• Patinetes eléctricos: un derivado del patinete tradicional cuya velocidad suele rondar los 15 kilómetros hora. La novedad que incluye es el motor con batería recargable (aunque autonomía bastante escasa, de entre 12 y 20 km) y un sistema de frenado distinto al habitual. Son útiles para trayectos cortos y sin muchos obstáculos. Han tenido muy buena acogida recientemente, sobre todo en grandes ciudades, donde abundan los negocios de alquiler y recarga de estos dispositivos. A pesar de ello, también han suscitado diversas críticas por la escasa regulación y los problemas que esto puede ocasionar.

• Carsharing: Han contribuido al liderazgo tecnológico de Madrid a nivel nacional mediante la compra de cientos de coches eléctricos para su uso en la ciudad. Así, empresas como Car2Go o Emov influyen positivamente en la percepción de los ciudadanos ante estas tecnologías (pues les permiten probarlas en primera persona por un precio bastante asequible) y aumentan el mercado, haciendo visible la necesidad de mejorar los servicios necesarios para su correcto desarrollo.

En las últimas tablas se muestran los datos actuales en el ayuntamiento de Madrid.

Como datos a destacar me resulta curioso la mucha diferencia que existe entre motocicletas y biciletas, al contrario que en otros países donde abundan estas últimas. La barra de autobuses aunque se ve muy pequeña en comparacion con los demás, nos indica el dato de que en Madrid hay 33 autobuses eléctricos, que pueden dar servicio a más de 1500 personas simultáneamente; reduciendo la huella de carbono notablemente.

Por último hablar de la gran cantidad de compañías que se distribuyen el sharing eléctrico en Madrid. Cabe destacar que las bicicletas se las reparten tan solo dos propietarios: el ayuntamiento de Madrid con Bicimad y que ademas esta empresa pública tiene el mayor número de vehículos; y la china Mobike donde creció en China de manera brutal arrasando con competidores como OFO o Alibaba, y que después de dos años allí decidió dar el salto a Europa en ciudades como Madrid o Amsterdam.



Este breve paper ha pretendido mostrar de manera objetiva y con datos de fuentes fidedignas la situación actual de la movilidad eléctrica en Europa y España de una forma muy general. Y además, animar al lector a que figure cómo sera el futuro de este tipo de movilidad. Y esperemos que sea, muy positivo.

Ramón Castro