Introducción

La práctica de actividad física y deporte en Colima posee múltiples dimensiones sociales: funciona como mecanismo de integración comunitaria, salud pública, desarrollo humano, prevención social y fomento del bienestar colectivo. No obstante, enfrenta retos como desigualdad territorial, necesidad de infraestructura adecuada, cobertura amplia y mantenimiento de espacios públicos. A continuación, los aspectos sociales del deporte en Colima:

a) Cohesión e Integración Social: El deporte facilita la convivencia entre personas de distintos contextos sociales, promoviendo valores de respeto, solidaridad, colaboración y sentido de comunidad. En Colima, el organismo estatal responsable (Instituto Colimense del Deporte) impulsa programas de cultura física y deporte social, federado, estudiantil, de alto rendimiento, adaptado, etc., buscando integrar a diversos sectores de la población. Además, mediante convenios con municipios (por ejemplo, con Tecomán, Colima) se busca fortalecer la práctica deportiva local, promoviendo la participación social como herramienta de transformación comunitaria.

b) Salud Pública y Bienestar: La actividad física regular contribuye a mantener la salud física y mental, prevenir enfermedades crónicas, combatir el sedentarismo y fomentar estilos de vida saludables. Colima participa en iniciativas de activación física, incluyendo su adhesión al programa nacional Ponte Pila — con lo que se organizan actividades físicas en espacios públicos y escolares dirigidas a diversos grupos sociales — buscando mejorar las capacidades físicas y reducir sobrepeso, obesidad y sedentarismo. Asimismo, entidades de salud como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Colima ofrecen en sus Centros de Seguridad Social cursos, talleres y actividades deportivas y recreativas (como natación, yoga, taekwondo, acondicionamiento físico, actividades para personas mayores) promoviendo bienestar y convivencia saludable.

c) Prevención del Delito, Violencia, Adicciones y Promoción de Paz Social: En Colima, el deporte es visto como una estrategia social preventiva. Por ejemplo, uno de los municipios implementa un programa que vincula la cultura física y el deporte con la prevención del delito, las adicciones y el uso indebido de sustancias, mediante clases públicas impartidas por promotores deportivos. Además, en 2025 se organizó la Carrera por la Paz y contra las Adicciones, promovida por el gobierno estatal en coordinación con Incode, como parte de sus actividades de fomento al deporte y lucha contra adicciones, con participación masiva de la ciudadanía. Estas acciones muestran cómo el deporte puede servir como canal de socialización positiva, ocupación del tiempo libre, prevención de factores de riesgo (violencia, adicciones) y promoción de la convivencia pacífica.

d) Desarrollo Humano y Personal: La práctica deportiva permite desarrollar disciplina, trabajo en equipo, autoconfianza, habilidades sociales, autoestima y sentido de pertenencia, contribuyendo al desarrollo integral de niñas, niños, jóvenes y adultos. Incode promueve diferentes modalidades (desde deporte social hasta alto rendimiento) lo cual permite a personas de distintos perfiles incorporarse, formarse y desarrollarse físicamente. También se da énfasis a la detección de talentos y la formación de entrenadores, lo que abre posibilidades de desarrollo deportivo y social para quienes desean comprometerse con el deporte de manera organizada.

e) Uso del Tiempo Libre y Entretenimiento: El deporte y la actividad física constituyen una forma saludable de recreación y aprovechamiento del tiempo libre para personas de todas las edades. Las actividades organizadas, eventos, torneos, actividades comunitarias, jornadas deportivas y recreativas ofrecen opciones de ocio sano, contribuyendo a disminuir el sedentarismo y promoviendo la convivencia. Por ejemplo, en la Semana Nacional de la Cultura Física y el Deporte se realizan activaciones de ejercicio al aire libre, caminatas, carreras, entre otras.

f) Inclusión y Equidad: La Ley de Cultura Física y Deporte del Estado de Colima reconoce el derecho de todas las personas (sin distinción de género, edad, condición social, discapacidad) a participar en actividades físicas y deportivas. La ley obliga al Estado y los municipios a coordinarse para garantizar infraestructura, accesibilidad, mantenimiento, así como promover el deporte social, recreativo, escolar, adaptado, etc. Esto permite fomentar la inclusión y ofrecer oportunidades de participación en deporte a sectores que de otra manera podrían quedar excluidos: jóvenes, niños, personas con discapacidad, adultos mayores, comunidades marginadas o rurales.

g) Infraestructura y Acceso: La ley estatal establece que la construcción, remodelación, adecuación, mantenimiento y recuperación de instalaciones deportivas es de interés público. El organismo responsable (Incode) coordina con municipios y asociaciones deportivas para asegurar que haya infraestructura suficiente, accesible y adecuada para las distintas disciplinas y modalidades: deporte social, de recreación, alto rendimiento, deporte adaptado, recreación pública, etc. Además, los convenios municipales (como el de Tecomán con Incode) buscan fortalecer la planeación de eventos deportivos locales, capacitar promotores, y ampliar la oferta deportiva en comunidades, lo que contribuye a descentralizar el acceso al deporte.

Aspectos Metodológicos

El objetivo central de este análisis es explorar cómo varía el tiempo dedicado a la actividad física o deporte en Colima, considerando diversos factores sociodemográficos y laborales incluidos en la base de datos derivada de la Encuesta Nacional sobre Uso del Tiempo (ENUT) del 2024. El análisis se realizó desde dos perspectivas complementarias: a) Participación: identificar si existen diferencias en la proporción de personas que realizan actividad física o deportiva según distintas características de la población y b) Intensidad del tiempo invertido: evaluar cómo cambia la cantidad de tiempo dedicado a estas actividades entre grupos, con énfasis en las variables categóricas disponibles. Se tomaron como variables explicativas diversas categorías presentes en la base de datos, tales como: sexo, grupo de edad, nivel educativo, condición de trabajo, condición de actividad económica, autoidentificación étnica (afrodescendiente o no, indígena o no) y situación conyugal. Este conjunto de indicadores permite caracterizar diferencias sociodemográficas en la participación en actividades físico–deportivas y en el tiempo dedicado a ellas. El análisis estadístico se llevó a cabo en dos etapas:

Análisis de participación

Se examinó la proporción de personas que realizan actividad física dentro de cada grupo categórico, generando contrastes mediante pruebas chi–cuadrada y porcentajes comparativos de participación

Comparación de medias del tiempo dedicado (tdeporte)

Para determinar si existen diferencias estadísticamente significativas en el tiempo promedio dedicado a la actividad física entre categorías de cada variable. Cuando la variable explicativa tenía dos categorías, se aplicó una prueba t para muestras independientes. Cuando la variable explicativa tenía tres o más categorías, se utilizó un ANOVA de un factor, en ambos casos se excluyeron observaciones con valores perdidos en la variable tdeporte o en la variable analizada.Estas pruebas permiten evaluar si las diferencias observadas en los promedios de tdeporte entre grupos pueden atribuirse al azar o indican patrones relevantes a nivel poblacional. Estos análisis contextualizan los resultados del tiempo dedicado, dado que algunos grupos pueden mostrar baja participación pero altos promedios entre quienes sí participan, o viceversa. Todo el procesamiento estadístico se realizó en R. Con este enfoque metodológico se busca: Determinar qué características sociodemográficas están asociadas con diferencias en el tiempo destinado a actividades físicas o deportivas. Aportar evidencia para comprender patrones de actividad física en Colima. Generar información útil para orientar intervenciones, programas o políticas relacionadas con salud, deporte y uso del tiempo. En el cuadro 1 se presenta la distribución porcentual de las variables sociodemográficas consideradas en el estudio.

Cuadro 1. Distribución de variables categóricas en el estado de Colima
Distribución
Variable Categoria Frecuencia Porcentaje
Sexo Hombre 410 47.79
Sexo Mujer 448 52.21
Grupo de edad 12-17 57 6.64
Grupo de edad 18-29 197 22.96
Grupo de edad 30-44 242 28.21
Grupo de edad 45-59 216 25.17
Grupo de edad 60-74 111 12.94
Grupo de edad 75-84 28 3.26
Grupo de edad 85+ 7 0.82
Nivel escolar Hasta primaria 152 17.72
Nivel escolar Secundaria 228 26.57
Nivel escolar Bachillerato 198 23.08
Nivel escolar Superior 280 32.63
Condición de trabajo 641 74.71
Condición de trabajo No 217 25.29
Condición de actividad económica Ocupada 645 75.17
Condición de actividad económica Desocupada 1 0.12
Condición de actividad económica Persona jubilada o pensionada 36 4.20
Condición de actividad económica Estudiante 47 5.48
Condición de actividad económica Se dedica a los quehaceres del hogar o al cuidado de algún familiar 114 13.29
Condición de actividad económica Estaba en otra situación 15 1.75
¿Se autoadscribe como afromexicano? 49 5.71
¿Se autoadscribe como afromexicano? No 809 94.29
¿Se autoadscribe como indígena? 230 27.28
¿Se autoadscribe como indígena? No 613 72.72
Situación conyugal Unión libre 115 13.40
Situación conyugal Separada 61 7.11
Situación conyugal Divorciada 35 4.08
Situación conyugal Viuda 48 5.59
Situación conyugal Casada 313 36.48
Situación conyugal Soltera 286 33.33

Resultados

Este apartado esta dividió en dos apartados, en el primero se analiza el nivel de participación en actividades físicas o deportivas por la población residente en el estado de Colima, analizando la prevalencia por las características demográficas consideradas y analizando diferencias significativas a partir de la prueba Chi-cuadrada. En el segundo apartado se analiza el tiempo dedicado a las actividades mencionadas de las personas que que participaron en ellas, analizando diferencias en las medias mediante la pruebas t- de student y ANOVA.

Participación en actividades físicas y deportivas

De acuerdo a la ENUT 2024 en la CDMX el 31.24% de las personas mayores de 12 años realizan alguna actividad física o deportiva. Nos interesa ahora comparara este porcentaje de participación en cada una de las categorías de las variables sociodemográficas. En primer lugar exploraremos graficamente estas cifras y posteriormente se presentan los resultados de las pruebas Chi cuadrado a fin de indagar si las diferencias observadas son significativas o no (cuadro 2).

La asociación entre las variables categóricas de interés y la participación en actividad física o deporte (variable P6_18) se evaluó mediante la prueba Chi-cuadrada de independencia. Esta prueba permite determinar si existe relación estadísticamente significativa entre dos variables categóricas, comparando las frecuencias observadas con las esperadas bajo la hipótesis de independencia.

La hipótesis a contrastar es: H₀ (nula): No hay asociación entre la variable categórica X y la participación (P6_18).

H₁ (alternativa): Sí hay asociación significativa entre ambas variables.

Un valor p < 0.05 indica evidencia suficiente para rechazar H₀ y concluir que existe asociación significativa.

Cuadro 2. Resultados de la Prueba Chi-cuadrada
Resultados Chi-cuadrada
Variable Chi-cuadrada gl p-value
Sexo 7.797 1 0.0052
Grupo de edad 19.444 6 0.0035
Nivel escolar 46.923 3 0.0000
Condición de trabajo 2.999 1 0.0833
Condición de actividad económica 23.829 5 0.0002
¿Se autoadscribe como afromexicano? 0.049 1 0.8255
¿Se autoadscribe como indígena? 6.065 1 0.0138
Situación conyugal 20.237 5 0.0011

A partir de lo observado en el cuadro 2 y las gráficas se infiere que: De acuerdo con la ENUT 2024, el 31.24% de las personas de 12 años o más en Colima realizan actividad física o deporte. Al comparar este nivel de participación entre distintos grupos sociodemográficos, se observan diferencias importantes que, en la mayoría de los casos, resultan estadísticamente significativas.

A partir de las pruebas se identifica el siguiente perfil de mayor participación en actividad física:

Sexo. La variable sexo muestra una asociación significativa con la participación. Esto indica que hombres y mujeres presentan niveles distintos de participación, siendo los hombres quienes reportan mayor involucramiento en actividad física con un nivel de participación en actividades fisicas o deportivas del 35.9% frente a un 27% de las mujeres. Las diferencias por sexo sugiere que persisten brechas de género en la práctica de actividad física. La mayor participación observada entre hombres puede estar asociada a factores culturales, la distribución de roles de género y el acceso diferencial a espacios recreativos. La menor práctica de ejercicio entre mujeres probablemente se debe a barreras relacionadas con el tiempo, la seguridad y la carga de cuidados. Tambien podria ser resultado de una variabilidad en la muestra.

Grupo de edad: El grupo de edad también presenta diferencias estadísticamente significativas, en general, los datos indican que la participación es mayor entre adolescentes (hasta un 43.9%) y jóvenes (hasta un 38.6%), y disminuye gradualmente conforme avanza la edad. Por tanto, el perfil típico es el de personas jóvenes o adultas jóvenes y con menor participación en los grupos mayores. Es importante advertir que hay un repunte significativo en personas de 60 a 74 años (hasta en un 35.1%) y en personas de 75 a 84 años (hasta en un 35.7%) para luego presentarse una caida significativa en personas mayores de 85 años. La disminución en edades avanzadas podría relacionarse con limitaciones de salud, cambios en el estilo de vida o menor acceso a actividades físicas adaptadas para personas adultas mayores.

Nivel escolar:El nivel educativo presenta una de las asociaciones más fuertes, los resultados indican que las personas con mayor escolaridad presentan niveles más altos de participación física o deportiva (hasta en un 45.7%), mientras que aquellos con educación básica tienden a participar menos: primaria (hasta en un 16.4%) y secundaria (hasta en un 25.4%), es decir el perfil más activo corresponde a personas con estudios superiores. Esto puede deberse a que las personas con un mayor grado de estudios sueles tener mayor informacion, capítal economico o disposicion a practicar alguna actividad fisica o deportiva.

Condición de trabajo: No se encontró una asociación significativa entre actividad física y condición de trabajo, esto sugiere que estar ocupado o contar con empleo no se relaciona con una menor probabilidad de realizar actividad física. Los resultados arrojados pueden deberse a diversos factores como el tiempo disponible en ambos casos. El hecho de que una persona este desocupada no quiere decir necesariamente que tenga la disposición para realizar alguna actividad fisica o deportiva.

Condición de actividad económica: La variable también presenta significancia estadística, En general, quienes están económicamente activos o se dedican a las labores del hogar muestran menor participación, hasta en un 24.6%, mientras que las personas desocupadas participan mayoritariamente en actividades fisicas o deportivas, hasta en un 100%. Esto podria explicarse debido a que las personas con disponibilidad emplean su tiempo en realizar dichas actividades o a un error en el muestreo estadistico.

Autoadscripción étnica: Tanto la autoadscripción afromexicana no presentan asociación significativa con la actividad física, mientras que la autoadscripción indigena si presenta una diferencia realmente significativa. Esto puede explicarse por el hecho de que las personas que habitan en la entidad poseen raices indigenas, lo que incrementa la muestra de las personas que se identifican así y modifican la relación entre autoadscripción y participación en actividades fisica; sin embargo, también podría deberse a tamaños de muestra limitados o a la necesidad de explorar otras dimensiones socioculturales que influyen en la actividad.

Situación conyugal: La situación conyugal sí presenta una asociación significativa, los datos muestran que personas solteras o divorciadas participan más, mientras que quienes están en unión libre o viudas presentan niveles mucho menores. Esto puede estar relacionado con diversos factores como disposición de tiempo, empleo del capital económico en otras responsabilidades o el grado de libertad de las parejas.

Con base en las variables sociodemográficas que sí resultaron significativas, el perfil de la persona que más frecuentemente realiza actividad física en Colima: Hombre joven o adulto joven, con escolaridad media o superior, económicamente no activo, sin pareja estable (soltero/a, divorciado/a). Las variable de autoadscripción indígena si muestra una influencia significativa mientras que la variable de autoadscripción afromexicana no muestran diferencias de participación. Como hemos dicho en el apartado de arriba, esto puede deberse a que en la entidad habitan mayoritariamente personas que se identifican como indigenas.

Los resultados muestran que la participación en actividad física en Colima es de 31.24%, cifra que evidencia que menos de la mitad de la población mayor de 12 años realiza alguna práctica deportiva o recreativa. Este nivel relativamente bajo subraya la necesidad de continuar promoviendo políticas públicas orientadas al fortalecimiento de hábitos saludables, especialmente en los grupos con menor participación.

En conjunto, los resultados evidencian que la participación en actividad física está influida por factores sociodemográficos que reflejan desigualdades estructurales en la ciudad. Esto sugiere que las políticas de promoción de la actividad física deben tener un enfoque diferenciado, considerando género, edad, nivel educativo y situación económica como ejes clave para mejorar la equidad en el acceso a actividades físicas y deportivas.

Tiempo semanal dedicado a actividades físicas y deportivas

En promedio, las personas en Colima que participan en actividades físicas o deportivas dedican por grupo de edad: 5.93 horas (12-17), 6.41 horas (18-29), 4.66 horas (30-44), 4.17 horas (45-59), 4.93 horas (60-74) y 2.55 horas (75-84) a la semana, teniendo que los datos de personas de 85+ no pueden considerarse eficientes. Empezaremos por explorar mediante gráficas de intervalos de confianza las diferencias según las características sociodemográficas consideradas. En un inicio se consideran solo las variables binarias

Cuadro 3. Resultados de la prueba t de Student para tiempo dedicado a actividades físicas o deportivas
Variable Grupo_1 Media_1 SD_1 n_1 Grupo_2 Media_2 SD_2 n_2 t gl p_value
Sexo Hombre 5.20 4.05 147 Mujer 5.11 4.09 121 0.16 255.18 0.8706
Condición de trabajo 5.04 4.11 190 No 5.45 3.97 78 -0.75 147.76 0.4535
¿Se autoadscribe como afromexicano? 4.60 5.23 16 No 5.19 3.99 252 -0.44 16.13 0.6635
¿Se autoadscribe como indígena? 4.40 3.97 57 No 5.36 4.09 206 -1.61 91.68 0.1118

Las gráficas de intervalos de confianza y las pruebas t aplicadas permiten inferir que entre las variables sociodemográficas binarias consideradas en este análisis, solo la condición de trabajo y la autoadscripción como afromexicano no muestran diferencias significativas en el tiempo semanal dedicado a actividades físicas o deportivas. Los hombres dedican más tiempo a estas actividades que las mujeres dentro de la población que ya participa en ellas.

Por el contrario, el sexo, la autoadscripción indigena, el grupo de edad, la condicióm economica, la situación conyugal y el nivel de escolaridad si presentan asociaciones estadísticamente significativas con el tiempo dedicado a la actividad física. Esto sugiere que, al menos dentro del grupo de personas que sí realizan estas actividades en Colima, dichas características influyen de manera importante en la cantidad de tiempo que se les dedica.

Ahora se analizará el tiempo dedicado a las actividades físicas o deportivas respecto a las variables: grupo de edad, nivel de escolaridad, condición de actividad económica y situación conyugal que tienen la particularidad de tener más de dos categorías, por lo que se deberá aplicar la prueba ANOVA en lugar de t de student.

Empezaremos por construir las gráficas de intervalo de confianza para el tiempo dedicado a la actividad física o deportiva de acuerdo a las categorías de interés, posteriormente se presenta el cuadro 4 con el resumen de las estadísticas descriptivas y finalmente el cuadro 5 con los resultados de la prueba ANOVA.

Cuadro 4. Estadísticos descriptivos de tiempo dedicado a actividad física o deportiva por categoría
Variable Categoria n media sd
Grupo de edad 12-17 25 5.93 4.09
Grupo de edad 18-29 76 6.41 5.00
Grupo de edad 30-44 56 4.66 3.01
Grupo de edad 45-59 61 4.17 3.35
Grupo de edad 60-74 39 4.93 3.87
Grupo de edad 75-84 10 2.55 2.09
Grupo de edad 85+ 1 14.00 NA
Nivel escolar Hasta primaria 25 3.64 3.18
Nivel escolar Secundaria 58 4.09 3.44
Nivel escolar Bachillerato 57 5.11 3.46
Nivel escolar Superior 128 5.96 4.54
Condición de actividad económica Ocupada 191 5.03 4.10
Condición de actividad económica Desocupada 1 2.50 NA
Condición de actividad económica Persona jubilada o pensionada 19 4.58 3.95
Condición de actividad económica Estudiante 25 6.33 4.32
Condición de actividad económica Se dedica a los quehaceres del hogar o al cuidado de algún familiar 28 5.57 3.87
Condición de actividad económica Estaba en otra situación 4 4.42 3.28
Situación conyugal Unión libre 20 4.55 3.50
Situación conyugal Separada 18 4.29 2.78
Situación conyugal Divorciada 14 3.64 3.89
Situación conyugal Viuda 9 3.33 2.03
Situación conyugal Casada 100 4.59 3.74
Situación conyugal Soltera 107 6.30 4.53
Cuadro 5. Resultados ANOVA: Tiempo dedicado a la actividad física o deportiva vs variables categóricas
Variable F_value gl1 gl2 p_value n_obs
Grupo de edad 3.8200 6 261 0.0011 858
Nivel escolar 4.3357 3 264 0.0053 858
Condición de actividad económica 0.6926 5 262 0.6294 858
Situación conyugal 3.2166 5 262 0.0078 858

Los resultados permiten comprender con mayor claridad las diferencias en el tiempo destinado a la actividad física o deportiva según las características sociodemográficas, revelando que no todas las variables categóricas influyen de la misma manera, lo que sugiere que factores individuales y contextuales afectan la práctica de ejercicio de forma diferenciada.

Grupo de edad: Esta variable mostró la mayor capacidad explicativa, con una disminución progresiva en el tiempo dedicado a la actividad física conforme aumenta la edad; los grupos jóvenes de 12 a 29 años reportan los niveles más altos (aproximadamente 6 horas semanales), mientras que las personas adultas y mayores dedican menos tiempo (entre 4 y 2.5 horas según la edad), posiblemente debido a responsabilidades laborales, familiares, cambios en la capacidad física y presencia de enfermedades crónicas; en los adultos mayores, limitaciones físicas, menor acceso a programas adecuados y percepción de autoeficacia pueden contribuir a la reducción, aunque incluso en estos grupos se observa participación suficiente para implementar intervenciones con programas adaptados y modalidades inclusivas.

Nivel escolar: Mostró diferencias relevantes, indicando que a mayor nivel educativo, mayor tiempo destinado a la actividad física, desde alrededor de 3.6 horas semanales en primaria hasta casi 6 horas en estudios superiores, lo que puede estar relacionado con mejor acceso a recursos, conocimiento de los beneficios de la actividad física y hábitos de autocuidado fomentados en entornos educativos, evidenciando brechas que deben considerarse al diseñar programas de promoción con estrategias accesibles y culturalmente pertinentes.

Condición de actividad económica: No presentó diferencias significativas; algunas categorías, como personas desocupadas o en situaciones especiales, mostraron medias más altas, pero estas parecen reflejar tamaños de muestra reducidos o alta dispersión más que patrones consistentes, sugiriendo que la práctica de ejercicio depende más del estilo de vida individual que del empleo formal o la condición económica, y que actividades como trabajo en el hogar o estudio pueden combinarse con la actividad física sin una relación directa con la ocupación.

Situación conyugal. Se observaron diferencias importantes, con personas solteras y en unión libre dedicando más tiempo a la actividad física (hasta 6.3 horas semanales) y personas viudas registrando los promedios más bajos (aproximadamente 3.3 horas), lo que puede reflejar la autonomía en la gestión del tiempo, dinámicas relacionales más flexibles en ciertos tipos de convivencia, barreras emocionales o de salud en viudas y responsabilidades familiares en matrimonios consolidados, mostrando que la actividad física está influida por contextos relacionales y afectivos.

Síntesis general: La edad, la escolaridad y el estado conyugal se identifican como factores relevantes para explicar el tiempo dedicado a la actividad física, mientras que la condición económica no resulta determinante; en conjunto, los hallazgos indican que la práctica de ejercicio se relaciona tanto con factores estructurales (edad, educación) como con factores personales y relacionales (estado civil), proporcionando información valiosa para orientar políticas públicas y comunitarias, como programas diferenciados por edad, estrategias inclusivas para población con menor escolaridad, atención a dinámicas familiares y emocionales en grupos específicos, y creación de espacios seguros y accesibles que fomenten la actividad física en distintos perfiles sociodemográficos.

Conclusiones

En resumen, el análisis de la actividad física y el deporte en Colima muestra que, aunque una parte importante de la población realiza ejercicio regularmente, el tiempo que le dedican varía según la edad, el nivel de estudios y la situación familiar. Los jóvenes y adultos jóvenes son quienes más se ejercitan, mientras que con la edad la dedicación disminuye, aunque las personas mayores todavía mantienen cierta actividad que puede aprovecharse con programas adaptados a sus necesidades. Las personas con estudios superiores suelen dedicar más tiempo al ejercicio, probablemente porque tienen mejor acceso a información, recursos y hábitos de cuidado personal. La situación laboral, en cambio, no parece afectar de manera clara el tiempo dedicado al deporte, mientras que el estado civil sí influye: quienes son solteros o viven en unión libre tienden a ser más activos, mientras que las personas viudas o casadas dedican menos tiempo. Esto muestra que la actividad física depende tanto de factores de la vida cotidiana como de la situación personal y familiar, por lo que las estrategias para fomentarla deben ser flexibles, accesibles y pensadas para todos, ofreciendo espacios, programas y oportunidades que animen a la población de Colima a mantenerse activa y saludable.

Bibliografía

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