Introducción:

La educación media o secundaria representa un pilar fundamental para el desarrollo personal y colectivo en cualquier sociedad, ya que proporciona competencias básicas, promueve la equidad y mejora las oportunidades laborales. Sin embargo, en muchas regiones del mundo, la tasa de finalización de este nivel educativo sigue siendo un desafío, especialmente en contextos de pobreza, desigualdad o falta de infraestructura. Según la UNESCO, en 2023, cerca del 20% de los jóvenes en países de ingresos bajos y medios abandonan la educación secundaria antes de completarla, limitando sus oportunidades futuras y perpetuando ciclos de pobreza. Comprender los factores que influyen en este indicador resulta esencial para diseñar políticas públicas más efectivas y equitativas.

El presente trabajo tiene como objetivo modelar la tasa de finalización de la educación media o secundaria en una muestra de 195 países, a partir de diversas variables independientes que podrían estar asociadas con este indicador. Entre ellas se consideran: la población en edad escolar (12 a 18 años), el producto interno bruto (PIB), el porcentaje del PIB destinado a educación, el índice de acceso a energía eléctrica, el índice de Gini (como medida de desigualdad), el porcentaje de población rural, la tasa de alfabetización, el desempleo juvenil, y las tasas de matrícula en educación media y terciaria.

A través de este análisis se busca identificar patrones, relaciones y posibles determinantes que afectan la finalización de la educación secundaria, entendiendo esta no solo como una cuestión educativa, sino también como el reflejo de condiciones estructurales más amplias. Para poder así comprender y pensar en estrategias que puedan promover la permanencia y culminación del ciclo educativo, especialmente en contextos donde aún existen brechas significativas.

El 'Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes' valoró el conocimiento de 540.000 estudiantes de 15 años de 72 países en ciencias, comprensión lectora y matemáticas. Singapur encabezó la lista.

En Somalia, millones de niños entre 8 y 15 años se ven excluidos del aula por el conflicto, la sequía, la pobreza o la edad.

Se observa en cómo los sistemas educativos varían en cuanto a calidad y resultados. Aunque Singapur es un país que ha logrado altos índices en educación, otros países enfrentan grandes desafíos debido a la falta de infraestructura educativa, acceso a recursos, y diferentes políticas públicas. Esto resalta la disparidad entre naciones en términos de resultados educativos, lo que a su vez afecta la movilidad social y el acceso a oportunidades económicas.

Los dos videos reflejan las desigualdades en el acceso y la calidad de la educación a nivel mundial. Por un lado, tenemos países como Singapur, que invierten en educación de alta calidad y logran un rendimiento sobresaliente en evaluaciones internacionales como PISA. Por otro lado, tenemos a Somalia, donde los niños enfrentan obstáculos como la guerra, la pobreza y la falta de infraestructuras educativas básicas, lo que limita drásticamente sus oportunidades de acceder a una educación de calidad.

Educación Media: Un Análisis de variables económicas, sociales y demográficas.

El abandono escolar en la educación media es un fenómeno complejo, determinado por la interacción de factores económicos, sociales y demográficos. Esta etapa educativa es clave para el desarrollo personal y profesional de los jóvenes, y su interrupción tiene implicaciones directas sobre la desigualdad, la pobreza y las oportunidades de inclusión en la vida productiva y ciudadana.

Desde una perspectiva económica, el Producto Interno Bruto (PIB) de un país y la proporción de ese PIB destinada al sector educativo inciden directamente en la calidad del sistema escolar. Estos factores determinan la infraestructura, los recursos didácticos disponibles y la formación del personal docente, lo que a su vez impacta la permanencia de los estudiantes.

En el ámbito social, el acceso a servicios básicos como la electricidad —especialmente en zonas rurales—, el nivel de alfabetización y el grado de desigualdad en la distribución de los ingresos (medido mediante el índice de Gini) crean condiciones que pueden facilitar o dificultar la continuidad educativa. Un entorno familiar con baja escolaridad o acceso limitado a servicios puede convertirse en un obstáculo para que los jóvenes valoren o puedan sostener su educación.

Además, las variables demográficas, como el tamaño de la población entre 12 y 18 años, reflejan la presión sobre los sistemas educativos. En muchos países, estos sistemas no logran absorber y retener a toda la población en edad escolar. Las tasas de matrícula en educación media y terciaria son indicadores clave para entender tanto el acceso como la proyección de continuidad académica en cada contexto nacional.

El anterior mapa ilustra la tasa de finalización de la educación media en distintos países. Esta visualización permite reconocer patrones geográficos, resaltar regiones en riesgo educativo y ofrecer una perspectiva global que contextualiza el análisis.

¿Qué datos usamos y por qué?

Para el desarrollo de este trabajo se integraron múltiples bases de datos provenientes de fuentes internacionales confiables como el Banco Mundial, la UNESCO y la OCDE. Se seleccionaron 195 países que contaban con información completa y actualizada para un conjunto de variables que permiten analizar los factores que influyen en la finalización de la educación media.Las variables fueron escogidas con base en su relevancia teórica y empírica, considerando estudios previos sobre desigualdad educativa y desarrollo social. Se buscó incluir dimensiones económicas, sociales y demográficas que pudieran tener una relación directa o indirecta con el abandono escolar en la educación media.

Variable
Tipo Descripción
Tasa de finalización de educación media Dependiente binaria (Sí/No) Indica si un país presenta una tasa de finalización por encima del punto de corte establecido.
Población entre 12 y 18 años Continua Número de personas en edad típica de educación secundaria.
PIB (en miles de millones de USD) Continua Producto Interno Bruto del país, como medida de su tamaño económico.
% del PIB destinado a educación Continua Proporción del gasto educativo respecto al PIB.
% de acceso a energía eléctrica Continua Porcentaje de la población con acceso a electricidad.
Índice de Gini Continua Mide la desigualdad de ingresos (0 = igualdad perfecta, 100 = desigualdad total).
% de población rural Continua Proporción de la población que reside en zonas rurales.
% de alfabetización Continua Porcentaje de personas mayores de 15 años que saben leer y escribir.
Tasa de desempleo juvenil Continua Proporción de personas entre 15 y 24 años sin empleo.
Tasa de matrícula en educación media. Continua Porcentaje de jóvenes matriculados en educación secundaria.
Tasa de matrícula en educación terciaria. Continua Porcentaje de jóvenes matriculados en educación superior.

Para operacionalizar la variable dependiente, la tasa de finalización de la educación media (expresada como porcentaje) fue transformada en una variable binaria categórica, con el fin de facilitar su análisis mediante modelos clasificatorios. Se utilizó como punto de corte la mediana global, cuyo valor fue de 74.74% entre los 195 países considerados.

De este modo, se definieron dos categorías:

  • Sí (1): Países con una tasa de finalización igual o superior al 74.74%

  • No (0): Países con una tasa de finalización inferior al 74.74%.

Esta decisión metodológica busca equilibrar la distribución de clases, lo cual es fundamental para evitar sesgos hacia una de las clases.

Determinantes globales de la Tasa de finalización de la Educación Media.

Los factores económicos, sociales y educativos influyen significativamente en la tasa de finalización de la educación media. Los países con mayores niveles de inversión en educación, menor desigualdad económica, y mejor acceso a servicios básicos como la electricidad y la alfabetización, tienen mayores probabilidades de superar la mediana global de finalización educativa.

Hay factores que no solo afectan el acceso a la educación, sino también las oportunidades de retención y éxito escolar de los jóvenes. A continuación, se presentan las hipótesis y las variables consideradas como determinantes principales.

  • Índice de Gini (Hipótesis 1: H1): La desigualdad económica medida por el índice de Gini tiene un impacto negativo en la tasa de finalización de la educación media. Esto implica que los países con menor desigualdad económica (índice de Gini más bajo) tienen mayores tasas de finalización educativa, ya que la equidad económica facilita el acceso y la permanencia en la educación.

  • Porcentaje del PIB destinado a educación (Hipótesis 2 (H2): Un mayor porcentaje del PIB destinado a la educación está positivamente relacionado con una mayor tasa de finalización de la educación media. El aumento en la inversión educativa mejora las condiciones y recursos disponibles, lo cual favorece la permanencia en el sistema educativo.

  • Tasa de matrícula en educación terciaria (Hipótesis 3: H3): Un mayor porcentaje de matrícula en educación terciaria está positivamente relacionado con una mayor tasa de finalización de la educación media. El acceso a la educación superior refleja un compromiso con el sistema educativo en general, lo cual puede contribuir a mejorar los niveles de retención en la educación secundaria.

  • Porcentaje de población rural (Hipótesis 4 (H4): Los países con una mayor proporción de población rural tendrán una menor tasa de finalización de la educación media. Esto se debe a las barreras estructurales que enfrentan los jóvenes en áreas rurales para acceder a educación de calidad, como la falta de infraestructura educativa adecuada y el menor acceso a recursos.

Análisis sobre la tasa de finalización de la educación media y sus determinantes estructurales.

Esta sección analiza las principales variables utilizadas para estudiar la tasa de finalización de la educación media. Se incluyeron indicadores socioeconómicos y estructurales de distintos países, presentados mediante estadísticas básicas y visualizaciones interactivas.

Variable Media Mediana Desviación Estándar
Tasa de finalización 63.4 67.0 21.5
Población entre 12 y 18 años 4.2 M 2.8 M 3.9 M
PIB per cápita (USD) 7,54 5,1 6,2
Gasto en Educación (% PIB) 4.4 4.1 1.3
Acceso a electricidad (%) 84.3 95.0 21.1
Índice de Gini 41.2 39.7 6.3
Población rural (%) 37.5 29.3 21.8
Alfabetización (%) 87.2 90.5 12.4
Desempleo juvenil (%) 19.4 16.3 9.5
Matrícula secundaria (%) 78.5 82.0 18.7
Matrícula terciaria (%) 29.1 21.0 20.3

Análisis sobre la tasa de finalización de la educación media y sus determinantes estructurales.

El análisis de datos muestra que la tasa de finalización de la educación media varía ampliamente entre países, con valores que oscilan desde menos del 10% hasta más del 95%. Esta variabilidad no es aleatoria, sino que responde a factores estructurales profundamente arraigados. Por ejemplo, países como Somalia —ubicado en África oriental— enfrentan retos multidimensionales como pobreza extrema, trabajo infantil, conflicto armado, baja inversión en infraestructura educativa y escaso acceso a servicios básicos, lo que repercute directamente en el abandono escolar temprano y en la imposibilidad de culminar el ciclo medio de educación.

La relación entre el PIB y la tasa de finalización de la educación media es clara: a mayor PIB, mayor es la tasa de finalización. Esto se debe a que un mayor ingreso nacional permite mayor inversión en infraestructura, programas sociales y educativos, formación docente, acceso a tecnología, entre otros factores. El gráfico de dispersión entre PIB y tasa de finalización así lo confirma, mostrando una tendencia ascendente en la medida en que el ingreso per cápita mejora. Sin embargo, también se observan casos atípicos que invitan a analizar la eficiencia del gasto público.

El acceso a servicios básicos como la electricidad es un indicador indirecto del nivel de desarrollo e infraestructura de un país. Su promedio en el análisis fue alto en general, pero aquellos países con menor acceso presentan también menores tasas de finalización. Esto sugiere que la falta de electricidad no solo impide condiciones adecuadas de estudio en el hogar, sino que también limita el funcionamiento de centros educativos. De forma similar, la tasa de alfabetización —con una media superior al 85%— se relaciona positivamente con la finalización del nivel medio, indicando que una base educativa sólida desde la infancia mejora la permanencia en el sistema.

El Índice de Gini, que mide la desigualdad en la distribución del ingreso, mostró una relación negativa con la tasa de finalización. En contextos con alta desigualdad económica, los jóvenes enfrentan mayores barreras para permanecer en el sistema escolar, debido a la necesidad de trabajar, la falta de oportunidades y la exclusión social. El desempleo juvenil, por su parte, afecta las expectativas y la motivación hacia la educación. Un joven que no encuentra oportunidades laborales puede percibir la educación como poco útil, lo que se traduce en mayor deserción.

El porcentaje de población rural también resultó ser un factor relevante. En zonas rurales, las barreras de acceso a instituciones educativas, la escasez de transporte, la inseguridad y las prácticas culturales como el matrimonio temprano, dificultan la continuidad educativa. La comparación entre las tasas de matrícula en educación media y terciaria refuerza esta tendencia: aunque muchos jóvenes logran ingresar al nivel medio, son pocos los que acceden a estudios superiores, indicando una alta deserción entre estos niveles.

Finalmente, el análisis del PIB destinado a educación evidencia que aquellos países que priorizan este sector logran mejores tasas de finalización. Esto reafirma que no basta con un alto PIB general, sino que es fundamental que los gobiernos asignen y ejecuten recursos adecuados para garantizar condiciones dignas de enseñanza y aprendizaje. La variabilidad en esta variable sugiere que los países podrían aumentar el impacto educativo mediante una gestión más eficaz del presupuesto educativo