Este trabajo analiza las diferencias de género en el mercado laboral de países desarrollados de la Unión Europea, seleccionados según sus mayores PIB per cápita .El objetivo principal es analizar las diferencias de género en el mercado laboral de países desarrollados que pertenecen a la Unión Europea, considerando la evolución a lo largo del tiempo, las comparaciones entre ellos y la variación respecto a los rangos de edad. Para ello, se realizarán análisis descriptivos, visualización e interpretación de gráficos. Los resultados destacan avances en la disminución de las brechas de empleo, aunque persisten desigualdades significativas, especialmente en la brecha salarial.
En el contexto laboral de los países desarrollados de la Unión Europea, surgen interrogantes relacionados a las causas y consecuencias de las desigualdades de género en el ámbito laboral. Estas desigualdades vistas en aspectos como las tasas de empleo, las horas trabajadas y las brechas salariales, no solo afectan el desarrollo profesional de las mujeres, sino que también indican dinámicas estructurales y culturales que limitan el acceso a oportunidades laborales.
Este trabajo tiene como objetivo analizar esta problemática por medio de un análisis descriptivo y comparativo, utilizando datos actualizados al año 2024; lo cual permitirá observar tanto las variaciones entre los países, así como los cambios en el tiempo y las diferencias según grupo de edad. Además, busca analizar de qué manera los factores económicos, sociales y políticos han impactado en estas brechas y qué patrones surgen en el contexto de los países más desarrollados de la Unión Europea. Se utilizarán técnicas estadísticas y gráficos que facilitan identificar tendencias y contrastar hipótesis relacionadas con la distribución desigual de las oportunidades laborales entre hombres y mujeres. Los 15 países seleccionados para este análisis fueron elegidos con el objetivo de destacar a los países más desarrollados en la Unión Europea. Para ello, segmentamos la muestra según los países con los 15 mayores PIB per cápita, lo que nos permitió centrarnos en economías avanzadas y bien establecidas, que tienen un nivel elevado de desarrollo económico y una estructura laboral robusta. Los datos utilizados en este estudio fueron obtenidos de la base de datos de “Eurostat”, una fuente actualizada que proporciona información estadística sobre diferentes aspectos económicos y sociales; obteniendo datos por país, género y rango de edad, lo que facilita la identificación de patrones y la comparación entre los países elegidos.
La hipótesis central de este estudio indica que, en todos los países analizados, la brecha de empleo es significativamente mayor para las mujeres en comparación con los hombres. De igual manera, se plantea que la brecha salarial presenta un comportamiento similar al de la brecha de empleo, reflejando así patrones de desigualdad entre ambos indicadores. Además, se espera que desde el año 2010 tanto la brecha de empleo como la salarial hayan mostrado una disminución en la mayoría de los países, aunque algunos hayan incrementado en ciertos periodos.
El artículo titulado “Análisis de las brechas de género en el mercado laboral de países desarrollados” representa un análisis completo que estudia la evolución histórica y el estado para el momento en que fue redactado (año 2014) acerca de las desigualdades de género en el ámbito laboral. Se desarrolla en tres partes; la primera, en la cual se presenta una revisión de la literatura económica que analiza los factores que han sido los principales responsables de la reducción de estas brechas desde mediados del siglo XX; estos tales como la participación de las mujeres en el mercado laboral después de la Segunda Guerra Mundial, avances tecnológicos y la mejora en la educación para mujeres. Luego, el artículo desarrolla un análisis descriptivo con datos recientes a esa fecha (2014) de la base de Eurostat. Este se centró en identificar y comparar brechas de género en varios indicadores laborales en los países europeos. Los resultados indican que a pesar de que las brechas de género en el empleo son menores en el sector de servicios, aún se presentaban diferencias significativas en términos salariales. También destaca cómo los países del norte de Europa presentan brechas menores debido a su enfoque en políticas de igualdad, en cambio, los países del sur y este de Europa presentan una brecha mayor. Por último, se concluye con una sección teórica, fundamentada en la teoría del desempleo de equilibrio, permitiendo interpretar cómo ciertos sectores, como el de servicios, pueden contribuir a la reducción de las desigualdades debido a una mejor adecuación entre oferta y demanda laboral.
Este artículo es un aporte importante al estudio de las brechas de género en el mercado laboral. Esto debido a que combina tanto un análisis histórico, descriptivo y teórico, aporta una visión clara y fundamentada sobre las causas y consecuencias de estas desigualdades. El motivo por el cual se seleccionó este artículo como guía es debido a su utilidad y relevancia en varios aspectos. En primer lugar porque está relacionado con el objetivo de nuestro trabajo, que también busca analizar y representar datos sobre diferencias de género. Otro aspecto importante que tomamos en cuenta fue su implementación de gráficos para representar las brechas de género en empleo, horas trabajadas y salarios. Estas representaciones gráficas son de utilidad para el desarrollo del trabajo porque nos permiten crear representaciones similares con datos recientes.
Una forma efectiva de visualizar la brecha de empleo entre hombres y mujeres es mediante la comparación directa de los porcentajes de empleo por género. El siguiente gráfico muestra esta información a través de un histograma que ilustra la distribución de las tasas de empleo según el género.
Gráfico 1.
Se observa que, en 2023, entre los países desarrollados analizados, las tasas de empleo para los hombres varían entre el 87,4 % en los Países Bajos y el 74,6 % en Croacia. En el caso de las mujeres, las tasas oscilan entre el 79,6 % en los Países Bajos y el 57,6 % en Grecia. En ambos extremos del cuartil 3, sugiriendo que el empleo se sesga entre valores más bajos dentro de su rango.
En los diagramas de cajas de se puede observar de nuevo la brecha de empleo entre hombres y mujeres, para los hombres vemos que el porcentaje de empleo se encuentra mayormente entre 81,25 y 74,6 mientras que para mujeres la mayoría se encuentra entre 67,25 y 76, 75, notándose la diferencia desfavorable para las mujeres en el mercado laboral. Además vemos que para los hombres la mediana se encuentra más cerca del cuartil 1, lo que sugiere que para ellos el empleo está sesgado en los valores más altos dentro de su rango, mientras que en el caso de las mujeres la mediana se encuentra más cercana al cuartil 3 .
Gráfico 2.
Ahora, es importante analizar la brecha de empleo para estos países, la cual se calcula como la diferencia porcentual entre el porcentaje de empleo de hombres y los rangos la tasa de empleo es inferior para las mujeres. Además, el gráfico muestra que este comportamiento no es solo para los extremos del rango, si no para cada país analizado, es decir, se muestran tasas de empleo mayores para hombres que para mujeres en cada uno de los países, denotando la existente brecha en el mercado laboral incluso en países con mercados altamente exigentes en la actualidad.
Gráfico 3.
La brecha de empleo entre hombres y mujeres varía significativamente
entre los países analizados. En 2023, oscila desde un mínimo de 0,2 % en
Finlandia hasta un máximo de 19,8 % en Grecia. Al comparar estos datos
con el Gráfico 1.1, se observa que Grecia e Italia no solo presentan los
porcentajes más bajos de empleo femenino, sino también las mayores
brechas de empleo entre géneros.
En el extremo opuesto, Finlandia destaca por tener una brecha mínima del
0,2 %, seguida de Lituania con un 1,5 %. A partir de aquí, se produce un
salto más notable en Francia, donde la brecha alcanza el 5,5 %. Por otro
lado, países como Bélgica, Croacia, Alemania, Eslovaquia, Austria y los
Países Bajos registran brechas similares, que se sitúan entre el 7,6 % y
el 7,8 %. Grecia e Italia destacan por tener brechas de empleo
significativamente superiores al resto de los países analizados, con
valores de 19,8 % y 19,5 %, respectivamente. En contraste, España, el
siguiente país en este orden, presenta una brecha mucho menor, del 10,3
%.
En términos generales, aunque seis países muestran una distribución más
homogénea de las brechas, con valores relativamente cercanos, se
identifican casos extremos que resaltan las desigualdades. Por un lado,
Finlandia y Lituania presentan brechas mínimas, mientras que Italia y
Grecia se encuentran en el extremo opuesto, evidenciando una disparidad
considerable. Los resultados obtenidos en los análisis realizados
confirman que la brecha de empleo es consistentemente mayor para las
mujeres en todos los países desarrollados de la Unión Europea
analizados. Esto se evidencia en los histogramas y diagramas de cajas,
donde las tasas de empleo masculinas son sistemáticamente superiores en
cada país.
Es importante analizar cómo se ha comportado la brecha del empleo a través del tiempo. La gráfica 4 contiene líneas de tiempo que van desde 2010 hasta 2023 de las brechas de Empleo de los 15 países desarrollados que se analizan. Como fue mostrado en el gráfico pasado se tiene a Finlandia y a Países Bajos con las menores brechas y a Italia y Grecia en los valores máximos, mientras que el resto de países se comportan de manera más homogénea. En este gráfico Lituania muestra que históricamente ha presentando niveles muy bajos en la brecha de empleo, sin embargo en años años anteriores como 2010 y 2011 la brecha de empleo es menor a la presentada en el resto de años, esto es especialmente interesante porque aunque es el país que ha presentando los valores más bajos en la brecha de empleo a través de los los años, y el segundo en la actualidad también es el país que que ha mostrado un mayor crecimiento en esta a través de los años, pasando de mostrar valores entre -1,5 y 1.2 entre 2010 y 2012 hasta un valor de 1.5 en 2023. Otro país con un aumento en el tiempo fue Irlanda, que mostró valores entre 9 en 2010 y 8,6 en 2012 y presentó aumentos de 12,4 en 2015 y 12,7 en 2020 siendo el picos más alto, y 9.9 en el 2023. Sin embargo, la mayoría de países han presentado una disminución de la brecha de empleo a través de los años. Esto se observa en los países que se sitúan entre rangos similares concentrándose entre 5,5 y 12,9. De manera general, los países desarrollados usados en este informe presentaron una disminución de la Brecha de empleo desde 2010, incluyendo a los países que muestran una mayor brecha en el empleo como Grecia e Italia, aunque esto capture el comportamiento de la mayoría de estos países, como fue mostrado anteriormente tienen diferencias en sus comportamientos y no todos han presentado disminuciones. En el siguiente gráfico, se presenta la disminución general de los países desarrollados que se obtuvo a través del promedio por cada año.
Gráfico 4.
Los resultados confirman que la brecha de empleo ha disminuido en la mayoría de los países desarrollados de la Unión Europea desde 2010. Sin embargo, algunos, como Lituania e Irlanda, han mostrado incrementos en ciertos periodos. A pesar de estas excepciones, la tendencia general apunta a una reducción en la brecha de empleo.
Gráfico 5.
Los resultados confirman que la brecha de empleo ha disminuido en la mayoría de los países desarrollados de la Unión Europea desde 2010. Sin embargo, algunos, como Lituania e Irlanda, han mostrado incrementos en ciertos periodos. A pesar de estas excepciones, la tendencia general apunta a una reducción en la brecha de empleo.
La brecha salarial también es un factor muy importante entre las desigualdades en el mercado laboral para las mujeres. A continuación se analizará la brecha salarial en el año 2022.
Gráfico 6.
En el gráfico se puede observar qué en el orden que se posicionan los países de mayor a menor en cuanto a la brecha salarial no es el mismo que el orden de la brecha de empleo para estos países, para la brecha salarial se observa que están en un rango de -0,7 y 18,4, que corresponden a Luxemburgo y Austria respectivamente, al comparar con la brecha de empleo vemos que estos países no están en los extremos, por ejemplo Italia se encuentra como el segundo países con un brecha salarial más baja, mientras en cuanto a la brecha de empleo es el segundo país con mayor brecha. También se observa que Alemania y Eslovaquia presentan la mayor brecha salarial. Por otro lado, Finlandia el cual es el país con una menor brecha de empleo tiene una brecha salarial de 15,5.
Gráfico 7.
Con el gráfico 7 se puede analizar la distribución de las brechas para los países analizados, se observa que la mayoría de los países presentan una brecha salarial entre 8.7 y 15.5, la mediana “12.5” está más cerca del cuartil 3, lo que sugiere que la distribución de la brecha salarial en los países están ligeramente sesgados hacia valores menores. Por otro, como ya se había detectado antes, Luxembourg presentan un valor negativo de -0,7, siendo el único caso donde la brecha salarial se mostró a favor de las mujeres, es decir, en este año las mujeres ganaron ligeramente más que los hombres, pero este valor es mucho más bajos que las brechas qué se presentan a favor de los hombres Los resultados indican que la hipótesis de que la brecha salarial sigue el mismo patrón que la brecha de empleo no se confirma. Aunque ambas reflejan desigualdades, los datos muestran discrepancias notables, como el caso de Italia, con una alta brecha de empleo pero una brecha salarial baja, y Finlandia, con el comportamiento opuesto. Esto evidencia que las brechas responden a dinámicas diferentes en los países analizados.
Gráfico 8.
De manera
general se observa que la brecha salarial es menor entre los Jóvenes en
el mercado laboral, y muestra que aumenta con la edad en la mayoría de
estos países, aunque en algunos países se muestra una disminución en la
brecha salarial para los grupos etarios “55-64” y “65 years +” los
valores más altos se encuentran entre el grupo etario “35-44” y “65
years +” . Este es un resultado interesante debido a que da un panorama
sobre la percepción de la edad y su influencia en el mercado laboral.
Otro caso interesante es el de España que muestra un valor negativo en
la brecha salarial para los menores de 25 años, esto significa que este
grupo etario las mujeres presentaron un mayor salario que los
hombres.
El presente análisis permitió identificar y comprender las dinámicas de las brechas de género en el mercado laboral de los países desarrollados de la Unión Europea, destacando tanto avances significativos como desafíos persistentes en la reducción de las desigualdades de empleo y salario. Algunos países como Irlanda y Luxemburgo, destacan por tener brechas laborales muy bajas. Sin embargo, de manera general en los países, la brecha tanto en el empleo como la brecha salarial, sigue persistiendo y reflejan desigualdades estructurales que afectan de manera desproporcionada a las mujeres.
También se observa que los países con mayores brechas de empleo no siempre coinciden con aquellos que presentan mayores diferencias salariales, lo cual valida la hipótesis que fue planteada en el estudio. Un aspecto positivo identificado fue la mejora significativa en el tiempo de las tasas de empleo femenino en varios países analizados. Esto refleja el impacto de políticas y cambios sociales que son direccionados a la equidad de género. El análisis de la brecha salarial quedó limitado debido a la disponibilidad de datos, lo que indica la necesidad de investigaciones más amplias que aborden este tema.
Las causas de estas brechas pueden deberse a distintos factores, es decir, son multifactoriales y, aunque no todas pudieron ser analizadas debido a que este solo busco analizar los datos actuales, es evidente que incluyen aspectos tanto culturales, estructurales e incluso económicos, que limitan la igualdad de oportunidades laborales para las mujeres.
De manera general, aunque existen estados dificultades para las mujeres en el mercado laboral, los resultados del análisis sugieren un panorama prometedor para el futuro. Se observan avances significativos en algunos países, donde las tasas de empleo femenino han mejorado a lo largo del tiempo gracias a políticas de igualdad y cambios sociales que han facilitado su participación en sectores anteriormente dominados por hombres. No obstante, sigue siendo evidente que las mujeres continúan estando menos presentes en el mercado laboral, especialmente en posiciones de liderazgo o en sectores con mayores niveles salariales.
Es importante recalcar que no en todos los gráfico se conto con la información de todos los países analisados.
Chamorro Claver, S., & Aisa Rived, R. (2016). Análisis de las brechas de género en el mercado laboral de los países desarrollados [Trabajo Fin de Grado, Facultad de Economía y Empresa, Universidad de Zaragoza]. CORE. https://core.ac.uk/display/289983703. Zona Euro. (s. f.). Datosmacro.com. https://datosmacro.expansion.com/paises/grupos/zona-euro#:~:text=Alemania%20es%20el%20pa%C3%ADs%20que,econom%C3%ADa%20por%20cuant%C3%ADa%20de%20PIB Home - Eurostat. (s. f.). Eurostat. https://ec.europa.eu/eurostat/web/main/home